Eutanasia: el derecho a la muerte digna

Al cumplirse diez años de la sanción de la ley de muerte digna, que permite que los pacientes terminales irreversibles tengan el derecho a decidir sobre las intervenciones que pueden ejercerse sobre sus cuerpos, es necesario poner en agenda un debate que todavía sigue siendo tabú: la eutanasia, un derecho restringido del que todavía no se habla.

Por Celeste Almada

La muerte desprende infinitas definiciones que son analizadas por muchos autores, sobre todo en la filosofía. Según el filósofo alemán Martín Heidegger, “la muerte en su más amplio sentido es un fenómeno de la vida. La vida debe comprenderse como una forma de ser a la que es inherente un ‘ser-en-el-mundo”. Pero por otra parte, nadie puede aventurarse a descifrar qué es lo que ocurre finalmente. Para los deudos de la persona que fallece, esa relación con la muerte es oscura, es un agujero en el medio del cuerpo, un dolor paralizante, donde muchas veces el tiempo y el espacio son intangibles. El tiempo realiza su trabajo  y naturalmente el proceso de duelo es lo que sigue luego de la pérdida que de alguna forma ayuda a la aceptación de la misma .
Ahora bien, ¿Qué ocurre cuando las enfermedades someten a la persona amada a la desintegración lenta? Cuando el bienestar y la calidad de vida van desapareciendo, es un acto de amor decidir que esa persona no sufra más, o si los sentidos del enfermx están activos y desea no seguir pasando por ese cruel camino, es válido que pueda decidir sobre su propia muerte. ¿No debería ser un derecho decidir cuándo y cómo morir?
En Argentina, el 9 de mayo de 2012, se sancionó en el congreso de la nación la Ley 26.742, llamada Ley sobre los derechos de los pacientes, historia clínica y consentimiento informado, promulgada el 24 de mayo del mismo año conocida como Ley de muerte digna. Lo que propone la normativa es que “Toda persona capaz mayor de edad puede disponer directivas anticipadas sobre su salud, pudiendo consentir o rechazar determinados tratamientos médicos, preventivos o paliativos, y decisiones relativas a su salud”.  A diferencia de la eutanasia, esta ley no permite a lxs médicos que puedan ayudar al paciente a asistirlo a poder tener el derecho de una muerte digna. ¿Qué es la eutanasia? Es una palabra  que viene del griego euthanatos, eu quiere decir bien y thanatos quiere decir muerte, por lo tanto, etimológicamente significa bien morir.
En este sentido la agrupación Revolución de las viejas realizó una charla que titularon: “Eutanasia y suicidio asistido, ¿se puede elegir cómo morir?”. Entre las personas que formaron parte de la mesa de debate se encontraba  Mario Sebastiani, médico e integrante del Comité de Ética del Hospital Italiano de la ciudad de Buenos Aires y autor del libro Si pudieras elegir cómo morir… ¿Qué harías?” . Sebastiani en esa charla sostuvo: “Necesitamos una comisión que favorezca y agilice el debate para que la gente pueda optar una muerte más digna, porque para cientos de pacientes es la salida más indicada”. 
Las palabras de Mario Sebastiani en esta charla refieren a que en la actualidad en el Congreso de la Nación hay cinco proyectos presentados por diferentes bloques que buscan legalizar la eutanasia y el suicidio asistido. Una de las diputadas que presentó uno de los proyectos, y que también formó parte de este encuentro fue Mara Brawer, diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires del Frente de todos, quién aseguró: “La muerte digna es poder decidir de manera libre e informada cuando un cuadro es irreversible y solo trae sufrimiento físico y psíquico. Defender el derecho a morir, es también el derecho a tener una vida digna”. 
En el mundo muchos países tienen legislación sobre la eutanasia. En la región, Chile dio media sanción al la ley sobre la eutanasia en abril de este año, y en Uruguay  el pasado 6 de octubre se dio  media sanción, que al igual que el país hermano cordillerano, propone la eutanasia en cuadros terminales e irreversibles. En el caso de  México, el Código Penal establece específicamente la práctica de la eutanasia y el suicidio asistido como un delito. Así mismo, el Código Penal de Perú sanciona el homicidio piadoso.
Sólo 8 naciones en el mundo avalan la eutanasia por ley, que a diferencia de la muerte digna, no se trata sólo de dejar de dar asistencia, sino de “ayudar a morir”.
España fue el último país en aprobar la eutanasia, el 25 de junio del 2021, y se sumó así a la lista que integran Holanda, Luxemburgo, Bélgica, Canadá, Colombia y Nueva Zelanda. También algunos estados de los Estados Unidos permiten a personas que están en una situación irreversible, incurable o insoportable de sufrimiento psíquico o físico decidir la finalización intencional de su vida a pedido de sí mismas.
En nuestro país es una deuda de la sociedad otorgar el derecho a poder decir, tanto a la persona enferma, cómo de quién ejerza la tutela en el caso de que lx enfermx no tenga la posibilidad por el deterioro profundo de su salud. Es doloroso, sin dudas, pero es un acto de amor y libertad hasta el final. La sociedad toda debe dar lugar al debate para que la vida y la muerte sean dignas. 

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