La Lucha por el reconocimiento de las Comunidades Indígenas

Por: Camila Brizuela

En Argentina se organizan más de 2000 comunidades indígenas habitadas por 40 pueblos originarios que hablan 20 idiomas diferentes al castellano. Pero, solamente en 15 años, fueron relevadas 900 de ellas gracias a la Ley 26.160 de Relevamiento Territorial, que permite el reconocimiento del Estado sobre las tierras que ocupan las comunidades indígenas de manera actual, tradicional y pública. Además de declarar la emergencia en materia de posesión y propiedad de estas tierras ocupadas.

Según un informe de Amnistía Internacional, la falta de reconocimiento legal de sus tierras, acorde a sus formas de uso y ocupación tradicional, deriva de la desposesión histórica de grandes extensiones de sus tierras por estancieros y por la presencia de empresas agropecuarias, petroleras y mineras. Por lo general, siempre que aparece un conflicto que involucra al territorio de las comunidades, la cuestión de fondo son los bienes naturales: como la madera, el litio, la soja o el agua, lo que provoca hechos de violencia y represión.

“Santiago del Estero es la provincia que cuenta con mayor relevamientos terminados, pero tuvieron que morir 4 personas para que se haga, lo que marca que no hay voluntad política y que hay confabulación”, según explica a Sudestada  Walter Barraza, Kamachej de la Comunidad Wayra Rimaj del pueblo Tonokoté Lluitki, de Santiago del Estero, perteneciente a las Organizaciones de Pueblos Indígenas del NOA (OPINOA). El problema es que la Ley, al ser sancionada en el 2006 bajo carácter de emergencia, fue solo por 4 años. Pero debido a la escasez de relevamientos ya fue prorrogada en tres oportunidades: en el año 2009, en el 2013 y en el 2017 con vigencia hasta noviembre de este año.

Foto Movimiento de Mujeres Indígenas

Frente a esta problemática el Kamachej Barraza cuenta que la prioridad, además de cuidar el territorio, es que la ley quede permanente. Aunque el reclamo actual también gira en torno a la urgencia de contar con una Ley de Propiedad Comunitaria Indígena, porque la 26160 no entrega el título de propiedad que ya están esperando las 900 comunidades relevadas. En las dos primeras prórrogas las peticiones fueron a través del diálogo pero en la del 2017 fue necesario realizar un acampe por 60 días frente al Congreso Nacional.

Las luchas dirigidas por OPINOA se realizan hace dos años y  cada dos meses en la Ciudad de Buenos Aires, con jornadas de visibilización, huelgas de hambre, acampes, mesas de diálogos y reuniones. En su territorio, según Barraza, es una pérdida de tiempo. En esta oportunidad OPINOA, en conjunto con la Organización Alianza por el Clima y la Comisión Nacional de Pueblos Indígenas de la APDH, se encuentran realizando jornadas frente al Congreso para visibilizar sus reclamos y propuestas. “Tenemos la certeza de que lo que hay que hacer es forzar con acción, nos preparamos para pelearla”, dice Walter.

El pasado 15 y 16 de marzo fue la primera de estas jornadas de visibilización presencial realizada en la Ciudad, con el fin de exigir la nueva prórroga de la Ley N° 26160 y la sanción de la Ley de Propiedad Comunitaria, a través del diálogo con asesores de diputados y senadores. El mismo escenario que se va a repetir todos los meses que sean necesarios. La demanda está enmarcada en un anteproyecto, aún vigente, realizado en el 2019 y firmado por las ex diputadas nacionales Victoria Donda y Silvia Horne.

Organizaciones de Pueblos Indígenas

Walter cuenta que todo lo que ellos reclaman ya está legislado porque el pedido de la Ley de Propiedad Comunitaria se incorporó a la Constitución en la reforma de 1994 y la Ley de Relevamiento se sancionó en el 2006. Aun así, ya pasaron 27 años de la reforma y la ley no existe y también pasaron 15 años de la sanción de la 26160 y sólo se relevó el 44% de las comunidades.

“Cada reclamo que hacemos en CABA va acompañado de una propuesta para lograr una sociedad que pueda vivir una interculturalidad”, remarca el Kamachej. Así fue que se conformó, con gente y organizaciones de la ciudad y de la provincia de Buenos Aires, la Red Intercultural de Equipos de Acompañamiento Indígena (RIEDAI), presente en cada movilización frente al Congreso Nacional.

Si bien la resistencia de los territorios y la propuesta de interculturalidad son en todo el país, los integrantes de OPINOA eligen la estrategia de venir a Buenos Aires. Pero a los territorios los están sosteniendo en toda la Argentina, desde Tierra del Fuego hasta el norte de Salta. “Lo hacemos con el cuerpo porque el Estado que es quién tendría que ocuparse, no lo hace, y nuestra prioridad siempre es sostener el territorio”, concluye Walter.

Organizaciones de Pueblos Originarios

Se puede firmar la petición acá: Por una ley permanente de relevamiento territorial indígena, por una ley de propiedad comunitaria indígena!

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