La Ex Esma es Memoria, no carapintada

Foto: Telam

Por Editorial Sudestada

A poco de cumplirse el aniversario del levantamiento carapintada, con Aldo Rico como cara visible, en el que -entre otras cosas- exigían que no se sigan investigando los delitos de lesa humanidad, y que además dio pie a la “Ley de obediencia debida”; ahora visitan el museo Malvinas dentro del predio de la Ex ESMA. El gobierno nacional busca ocupar el Espacio de Memoria –Patrimonio de la Humanidad- con personajes de la peor calaña histórica. El 2 de abril, para ser más precisos, estuvo de “visita” Cecilia Pando, militante del terrorismo de Estado, amiga y ladera de Victoria Villarruel. La vicepresidenta a la que Rico definió como “una patriota en un país sin patria”.

Como no pueden demoler la Ex ESMA –tal como intentó Menem en los 90-, como no pueden tocar un solo cuadro porque el Espacio se declaró Patrimonio Histórico de la Humanidad, pretenden ocuparlo con reivindicadores del genocidio, con los “carapintadas”, y con acciones que promueven el olvido, que atacan a la Memoria, y que respalda a la “escuela del terror”.

Visitan el Museo Malvinas, hablan de la guerra en las Islas, pero jamás de la responsabilidad de la dictadura militar, de las torturas a combatientes, de los pibes que mandaron a morir, del desprecio hacia ellos abandonándolos en los campos de batalla. No hablan del hambre y el frío de los pibes, mientras las grandes cúpulas tomaban whiskey en el continente sin tirar un solo tiro.

Para la foto en la Ex ESMA –como provocación e intención- está Aldo Rico, ex carapintada, y quien el año pasado a través de sus redes había promovido otro levantamiento que –claramente- no tuvo éxito. Pero para que quede claro, los monstruos de la historia no se fueron, ni están muertos, como sostienen desde algunos ámbitos cómplices y funcionales al terror uniformado.

Rico es otra muestra, como lo fue el homenaje en la Legislatura porteña el año pasado, el rumor de los indultos, la “reconciliación” con las fuerzas armadas, y ¿qué otro paso se espera del fascismo disfrazado de la falsa “libertad”?

La Ex ESMA es Memoria, es del pueblo, es nuestra, aunque les duela.

Imagen: Télam

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