Lo que el voto nos dejó

Ni bien se dieron a conocer los resultados de las elecciones, los búnkers de los principales partidos empezaron a mostrar algunos rostros preocupados y otros repletos de algarabía, pero en la mayoría de los casos, rostros sorprendidos. Es que lo sucedido en el cierre de los comicios demostró una vez más que rara vez las encuestas comprenden y reflejan el sentir social. De hecho, pese a la mayoría de los pronósticos, el nivel de participación ciudadana en las PASO 2021 llegó al 67%. Vimos al oficialismo con unas pésimas elecciones, a Juntos por el Cambio con un gran avance después de la derrota de 2019, al Frente de Izquierda, lejos de las dos primeras fuerzas, pero posicionándose como tercera fuerza nacional y a la consolidación de Javier Milei como candidato emergente de la nueva-vieja derecha. La decepción política marcó las urnas y la derecha vuelve a la carrera. 

Por Editorial Sudestada 

Ayer el panorama desolador habitaba el espacio oficialista del Frente de Todos. La dirigencia de esta fuerza política entregó el micrófono a Alberto quien, con un tono sereno, reconoció los errores cometidos en el último tiempo. “A partir de mañana vamos a trabajar para que los argentinos nos acompañen. La campaña acaba de empezar y en noviembre, tenemos que ganar. El país necesita no volver atrás”, dijo Fernández en su discurso. 
El resultado significó un gran golpe para el gobierno y deberán realizar mejores acciones a partir de hoy si no quieren que esto se vea reflejado en las elecciones legislativas del 14 de noviembre.
La derrota del FDT, en casi todo el territorio nacional, expresa la necesidad urgente de replantear una agenda donde se prioricen las problemáticas evidentes vinculadas a economía y trabajo.
“Vamos a escuchar el mensaje del domingo. Sabemos para qué nos votaron: para que generemos trabajo, y para mejorar la vida que teníamos y que queremos recuperar. Lo vamos a hacer independientemente del resultado electoral”, fueron las palabras del jefe de gabinete, Santiago Cafiero, en Radio 10.
La paliza electoral es un llamado de atención. Para poder interpretarlos con precisión es imperioso dejar de lado lecturas soberbias y autoproclamatorias. El efecto de la difusión de la foto del cumpleaños en Olivos en pleno confinamiento terminó de romper el vínculo y la imagen positiva de Fernández, alejado del sufrimiento de miles de familias que perdieron familiares y muchos que perdieron puestos de trabajo o sus negocios grandes, medianos y pequeños.

La derecha que gana terreno
Juntos por el Cambio obtuvo más de 8 millones de votos a nivel país, lo que representa aproximadamente un 38% de los votantes según los conteos oficiales. Los mismos que hundieron el país con sus políticas de ajuste y entrega, los que nos dejaron sin Ministerio de Salud, los que vaciaron las escuelas, los antiderechos de siempre. “Queremos que nos den como equipo una nueva oportunidad para cambiar las cosas”, manifestó María Eugenia Vidal. ¿De qué oportunidad nos habla la ex gobernadora mientras Macri, desde las sombras del escenario, asiente reconfortado y Horacio Rodríguez Larreta se consolida como jefe político del espacio? ¿Volver al desastre que provocaron no sólo en la provincia de Buenos Aires, sino en todo el país durante su gobierno?. Fueron ellos los que nos entregaron al FMI, los que reprimieron a jubilados y docentes, los que desaparecieron a Santiago, los que negaron el terrorismo de Estado. Son los de siempre, los que con un lavado de cara y empapados en marketing intentan borrar la debacle que hicieron. 
Por otro lado, una de las sorpresas de la jornada electoral de ayer (por su vertiginoso ascenso) fue el autodenominado “batacazo” de Javier Milei. Obtuvo el 13% de los votos y se consolidó como tercera fuerza en Capital Federal. “No vine a guiar corderos, sino a despertar leones”, gritó desaforado el liberal en modo líder espiritual. 
Durante la campaña, este economista devenido en personaje mediático de la política electoral, se acercó a la juventud para prometer un modelo de país librado a los mercados y abiertamente liberal. Lo escuchamos hablando de “la superioridad genética”, y decir barbaridades, como que está en contra del aborto porque cree en el proyecto de vida del prójimo. “La mujer puede elegir sobre su cuerpo, pero lo que tiene dentro del vientre no es su cuerpo, es otro individuo”, había declarado públicamente en una clara posición antiderechos. Pareciera que está dispuesto a todo y que su probable banca en la legislatura va a ser una amenaza para todxs. Su posible alianza con Juntos por el Cambio se asoma en el horizonte. Esperemos que la juventud no deje devorar sus conquistas y que no nos coma el león de los antiderechos.

La izquierda da batalla en las urnas 
Otra realidad se daba en el búnker del Frente de Izquierda de los Trabajadores, ya que por primera vez en sus diez años de existencia como frente electoral se posicionaron como tercera fuerza a nivel nacional con el 6.3% de los votos. En Jujuy, la lista del FIT-U encabezada por Alejandro Vilca -recolector de residuos y referente del espacio- alcanzó el 23.66 %, disputando el segundo lugar con el peronismo. Si el resultado se repite en noviembre, le permitiría entrar al Congreso Nacional. “Es la mejor elección en diez años de las PASO. A nivel país fuimos la tercera fuerza: fueron más de un millón de votos”, dijo Myriam Bregman en Radio 10. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Bregman hizo una buena elección (la mejor del FIT en la Ciudad) llegando a superar los 6 puntos y Nicolás del Caño en Buenos Aires superando los 5 puntos. De mantenerse estos números podrían ascender a 4 bancas para dar pelea y posicionarse para las elecciones de 2023.  

Fuera de pista
Los que no van a participar de las próximas elecciones son Cynthia Hotton, Cinthia Fernández, Guillermo Moreno, Juan José Gómez Centurión y Julio Bárbaro entre otros. Varios de ellos recordados por sus spots de la vergüenza. Estos porcentajes serán ahora disputados por las fuerzas políticas que siguen en carrera para las elecciones de noviembre 2021. 
Con dos meses para ajustar las tuercas de una campaña que hasta el momento presentó nulas propuestas significativas para nuestro pueblo, veremos si el tirón de orejas al oficialismo sirve para terminar con el circo mediático en pos de políticas reales que comiencen a modificar positivamente la vida de la gente. Aún todo está por verse y, de momento, los únicos números que son claros son los de la desocupación y pobreza.

Anterior

Andrés de la torre: “No voy a claudicar”

Próxima

Myriam Bregman: “Vamos a pelear por bancas que representen a los trabajadores y trabajadoras”