Berta Cáceres: una justicia de espaldas a la heroína

Por Emilio Mendoza

Desde que el pasado mes de noviembre, cuando los hondureños y hondureñas sellaron en las urnas el final del gobierno de Juan Orlando Hernández (JOH), se ha abierto en tierras catrachas un portal de esperanza hacia la reconquista de muchos derechos postergados por años de neoliberalismo. 
Con un puñado de promesas cumplidas y una gran agenda de pendientes, el Gobierno de Xiomara Castro llegó a sus primeros cien días de gestión. Tras un convulsionado arranque dominado por un congreso paralelo, la extradición de JOH a EE.UU. y una crisis postpandemia que se profundizó con el comienzo de la guerra en Ucrania el gobierno intentó mostrar este miércoles una señal de cambio en el rumbo de su gestión con la aprobación de una serie de reconocimientos a la figura de Berta Cáceres.
En este plano el Congreso Nacional aprobó la elevación de Berta Cáceres a la categoría de Heroína de la Nación y autorizó a que la impresión de los nuevos billetes de 200 Lempiras llevara su rostro. Asimismo, rebautizó con el nombre de la dirigente indígena al máximo galardón con el que el país reconoce a las mujeres luchadoras por cuestiones ambientales y de derechos humanos. 


Si bien estas medidas significan un reconocimiento a la lucha del pueblo Lenca y un giro necesario con respecto a las políticas persecutorias, negacionistas y encubridoras llevadas adelante por el expresidente Hernández, las hijas de Berta Cáceres se expresaron con cautela ante estas reformas. Olivia Zúñiga dijo que a pesar del gran avance que significa “queda pendiente cancelar la concesión del Proyecto Agua Zarca”, proyecto contra el que luchó y por el cual terminó asesinada Berta. Con mas dureza se expresó su otra hija, Laura Zúñiga, que posteó en sus redes: “me dolería ver el rostro de mi madre siendo guardado en los bancos de sus asesinos. ¿Ellos pagarán en billetes de 200 su próximo asesinato? Después de todo están en la impunidad. Decir que Berta Cáceres es una heroína es bonito, pero hacer justicia es la mejor forma de homenajearla”. Por su parte el COPINH (organización fundada por Berta Cáceres) comunicó que, “si bien agradecen el gesto del Congreso Nacional, esto no debe opacar la deuda del Estado por ejercer justicia contra los que pagaron por su asesinato… Mientras sus asesinos intelectuales no estén encarcelados y el río Gualcarque libre de concesión no hay justicia ni honra a la memoria de Berta”.
A seis años del asesinato de Berta Cáceres, solo fueron condenados cuatro de sus autores materiales, mientras que los autores intelectuales siguen en libertad y solo un exgerente de DESA (empresa encargada del proyecto de Agua Zarca) se encuentra procesado, pero sin condena, ya que la Corte Suprema de Justicia pospuso para el siguiente mes su sentencia. 
Escribió Galeano “la justicia es como la serpiente, solo muerde a los descalzos.”

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