Categoría: Lecturas

[Audiolibro] La parte honda del río, de Juan Solá

AUDIOLIBRO GRATUITO / LA PARTE HONDA DEL RÍO de Juan Solá*(Todos los relatos leídos por Juan Solá, disponibles desde cualquier plataforma) "La parte honda del río" contiene una de las narrativas de la infancia más

Kaidú: La novela que recibió el Premio Sara Gallardo

En “Kaidú” intentamos meternos en la cabeza de un perro callejero, distinto al resto por su forma de andar el mundo, independiente y rebelde. Así lo siente Aína, que lo conoce a partir de una

Escenas narradas de “Los amores urgentes” de Juan Solá

La tarde del viernes se colmó de poesía y palabra en nuestra Librería de Tucumán 1533. Agrandamos el espacio y contamos con la presencia de nuestro querido escritor Juan Solá. Escenas narradas que se vuelven

El disfraz del niñito Dios

Lo que más me gusta de la siesta es subir al árbol de guayabas, que tiene las ramas flexibles, como trampolines, y acostarme cerca de la copa, donde se juntan las chicharras a cantar. Le

El gigante que no quiso ser piedra

Cuentan quienes conocen las historias prohibidas que, en un reino gobernado por un déspota sordo, como casi todos los déspotas, se prohibieron los cuentos y se censuraron las palabras.El tirano decidió que no se relataran

Los hipopótamos transpiran rosado

Hola Sarita, ¿Cómo estás? Te cuento que yo estoy muy contento porque al final, las vacaciones llegaron más rápido y la semana que viene mi mamá me va a venir a buscar para llevarme a

La parte honda del río

Estoy muy preocupado por él, dijo el tío Antonio, agarrándose el pecho y mirándome con los ojos tristes, pero por fuera nomás, porque por dentro los tenía vacíos, como si alguien se hubiera robado sus

8M

Hoy me desvelé a las seis, como ayer, anteayer y antes de anteayer.No sé bien que me pasa. Ando sensible, con el llanto en la punta de la lengua. Hace cinco días que me tiene

Cuando hablábamos con los muertos

A esa edad suena música en la cabeza, todo el tiempo, como si transmitiera una radio en la nuca, bajo el cráneo. Esa música un día empieza a bajar de volumen o sencillamente se detiene.

Unos duraznos blancos y muy dulces

Por los años 42 o 43, en Alta Gracia, mi primo y yo íbamos todos los jueves a la plaza Manuel Solares, a la hora de la retreta, para vengarnos de que no nos dejaron